10 pasos para teletrabajar con dailyjob

¿Cuáles son las causas que generan desconfianza a la hora de implantar políticas de teletrabajo?

El teletrabajo puede definirse como una forma de desarrollar la actividad profesional desde un lugar distinto al puesto de trabajo, y todo ello a través de medios digitales. Ahora bien, teletrabajar no implica necesariamente trabajar desde casa, puede hacerse desde espacios de coworking, desde oficinas de clientes, o desde cualquier ubicación que permita conectarse a los medios necesarios.

A priori, esto suena bastante positivo si se analiza en términos de flexibilidad, pero del mismo modo, genera un gran recelo por parte de las personas que gestionan equipos por la falta de control o la visibilidad del trabajo realizado.

Si lo pensamos, ¿se tiene más capacidad de control si una persona está sentada en la silla de su oficina? Lo único que puede asegurarse es que esa persona ha ido a trabajar, pero no que vaya a acabar haciendo lo que tiene que hacer.

¿Cómo se puede asegurar entonces que se hace lo que se tiene que hacer?

Revisando la actividad pendiente, evaluando prioridades y marcando objetivos a corto plazo. Esta es la clave, y a su vez es el problema. Esto que parece tan sencillo requiere contar con una metodología de trabajo definida, requiere contar con herramientas digitales que trabajen para el equipo, y requiere implicación de todo el equipo.

Si un equipo es capaz de establecer objetivos, de asignar responsabilidades, y de fijar fechas de entrega en base a la carga real de trabajo, ¿realmente es importante que una persona desarrolle su trabajo desde su oficina o desde un espacio más cercano a su hogar?

Hoy en día se cuenta con numerosas herramientas para poder potenciar la planificación, el seguimiento y la comunicación durante el desarrollo de los proyectos. Entre estas soluciones encontramos dailyjob.io.